Comentario Literario de Tristes querellas en una vieja quinta
AUTORA: Denisse Isabel Jara Huaringa
Comentario literario de “Tristes querellas en una vieja quinta”
El cuento Tristes querellas en una vieja quinta fue publicado en Paris en 1974 por Julio Ramón Ribeyro, este cuento junto a otros forman parte de una recopilación llamada La palabra del mudo, dividida en dos tomos. Ribeyro es considerado uno de los mejores cuentistas en todo Latinoamérica, además el escritor peruano ha sido galardonado a premios que resaltan su carrera como escritor.
Tristes querellas en una vieja quinta y en general todos los cuentos pertenecientes a dicho compendio, corresponden a un movimiento literario desarrollado en el siglo XX, el neorrealismo, Ribeyro mediante este movimiento muestra la realidad dura y en ocasiones cruel de la generación del 50 a la que este pertenecía.
En cuanto al plano del contenido, el cuento nos relata la historia de Memo y Pancha, ambos eran vecinos en una vieja quinta miraflorina, donde constantemente discutían. La trama se va desarrollando a medida que las discusiones se van acrecentando hasta el punto de convertirse en grandes peleas. El tema principal del cuento son los conflictos producto de la intolerancia que los personajes se tenían, esto originaba que de alguna manera u otra los personajes se sientan en compañía con la presencia del otro. Esta intolerancia se manifiesta en casi todo el cuento ya que los gustos que Memo y Pancha presenciaban eran completamente diferentes, lo que ocasionaba ciertas discusiones. Las costumbres y la forma de vivir de Memo y Pancha sufrieron una transformación gracias a estos conflictos, prácticamente la vida de uno dependía del otro.
Podemos considerar a Memo García y a Doña Pancha como personajes principales debido a que la historia gira entorno a la vida de ambos. Ribeyro le otorga a sus personajes características específicas para darle un sentido de picardía, pues este muestra a Memo como un hombre soltero y acostumbrado a una rutina diaria antes de la llegada de Doña Pancha como lo dice el texto en la siguiente cita: “Su vida, en una palabra, estaba definitivamente trazada”, cuando Pancha llega es descrita como una mujer de avanzada edad, morena, corpulenta. “(…) Justo en el momento en que una señora gorda, casi enana, de cutis oscuro, asomaba con un pañuelo amarrado en la cabeza y una jaula vacía en la mano (…)”.
En cuanto al plano del contenido, el cuento nos relata la historia de Memo y Pancha, ambos eran vecinos en una vieja quinta miraflorina, donde constantemente discutían. La trama se va desarrollando a medida que las discusiones se van acrecentando hasta el punto de convertirse en grandes peleas. El tema principal del cuento son los conflictos producto de la intolerancia que los personajes se tenían, esto originaba que de alguna manera u otra los personajes se sientan en compañía con la presencia del otro. Esta intolerancia se manifiesta en casi todo el cuento ya que los gustos que Memo y Pancha presenciaban eran completamente diferentes, lo que ocasionaba ciertas discusiones. Las costumbres y la forma de vivir de Memo y Pancha sufrieron una transformación gracias a estos conflictos, prácticamente la vida de uno dependía del otro.
Podemos considerar a Memo García y a Doña Pancha como personajes principales debido a que la historia gira entorno a la vida de ambos. Ribeyro le otorga a sus personajes características específicas para darle un sentido de picardía, pues este muestra a Memo como un hombre soltero y acostumbrado a una rutina diaria antes de la llegada de Doña Pancha como lo dice el texto en la siguiente cita: “Su vida, en una palabra, estaba definitivamente trazada”, cuando Pancha llega es descrita como una mujer de avanzada edad, morena, corpulenta. “(…) Justo en el momento en que una señora gorda, casi enana, de cutis oscuro, asomaba con un pañuelo amarrado en la cabeza y una jaula vacía en la mano (…)”.
Estos dos personajes mantenían una relación muy cercana porque eran vecinos en una quinta, por lo tanto se veían las caras con mucha frecuencia. El sentimiento que continuamente se destaca tanto en Memo como en Pancha es la molestia y la ira, estos dos sentimientos se hacen presente a lo largo del relato como resultado de los conflictos.
Al analizar la composición del texto, podemos encontrar en la estructura externa párrafos extensos y prolongados, que permiten dar una narración descriptiva y detallada de los hechos, además todo el texto está escrito en prosa, en muchas ocasiones, el narrador recurre a los discursos directos para dar participación a los personajes. El título del cuento Tristes querellas en una vieja quinta hace referencia a los enfrentamientos verbales y no verbales que los personajes mantuvieron. De esta manera el título otorga al lector una noción de todo el cuento, ya que es posible inferir que la palabra “querellas” hace referencia a la falta de armonía entre dos o más personas y esto queda totalmente demostrado en el relato.
Del mismo modo, el texto internamente se puede dividir en dos apartados, de acuerdo a los hechos que marcaron u obligaron a que Memo García cambie sus hábitos, para ser más específicos, hechos que transformaron la forma de vida que Memo García tenía prevista. El primer apartado se encuentra al inicio del cuento, cuando Doña Pancha viuda de Morales hace su primera y definitiva aparición en la quinta de Miraflores, este peculiar personaje hace que Memo modifique poco a poco su rutina, pues la presencia de Pancha en la quinta le ocasiona incomodidad, es por ello que Memo se dedica a espiarla para conocer sus movimientos y tratar de evitarla, tal y como dice la siguiente cita:
(…) pero luego resolvió que el único partido a tomar era espiar a su vecina. Por intuición sabía que la única manera de derrota a un enemigo –y esa señora gorda lo era- consistía en conocer escrupulosamente su vida, dominar por el intelecto sus secretos más recónditos y descubrir sus aspectos más vulnerables. (Ribeyro, 1974, p.65)
El segundo apartado lo encontramos al desenlace del cuento, pues ambos personajes pasaban día y noche en constante conflicto hasta por cosas insignificantes y tras el fallecimiento de la morena, el narrador manifiesta que aquel hecho tornó el comportamiento de Memo igual al de un hombre solitario. “(…) Se aburría en su cuarto silencioso, adonde habían terminado por llegar las grietas de la pieza vecina. Pasaba largas horas en la galería fumando sus cigarrillos ordinarios, mirando la fachada de esa casa vacía, en cuya puerta los propietarios habían clavado dos maderos cruzados.” En relación al análisis del plano de la expresión, encontramos que el narrador se presenta de manera homodiegética, como testigo, esto otorga efecto de verosimilitud a los hechos que se suscitaron en el cuento, ya que el narrador cuenta lo que vió y escuchó haciendo prevalecer el lenguaje que los personajes utilizan al expresarse uno del otro. “(…) Nosotros los habitantes de la quinta, comenzamos a darnos cuenta que esa banal enemistad entre vecinos hollaba el terreno del delirio. (…)”
Del mismo modo, el texto internamente se puede dividir en dos apartados, de acuerdo a los hechos que marcaron u obligaron a que Memo García cambie sus hábitos, para ser más específicos, hechos que transformaron la forma de vida que Memo García tenía prevista. El primer apartado se encuentra al inicio del cuento, cuando Doña Pancha viuda de Morales hace su primera y definitiva aparición en la quinta de Miraflores, este peculiar personaje hace que Memo modifique poco a poco su rutina, pues la presencia de Pancha en la quinta le ocasiona incomodidad, es por ello que Memo se dedica a espiarla para conocer sus movimientos y tratar de evitarla, tal y como dice la siguiente cita:
(…) pero luego resolvió que el único partido a tomar era espiar a su vecina. Por intuición sabía que la única manera de derrota a un enemigo –y esa señora gorda lo era- consistía en conocer escrupulosamente su vida, dominar por el intelecto sus secretos más recónditos y descubrir sus aspectos más vulnerables. (Ribeyro, 1974, p.65)
El segundo apartado lo encontramos al desenlace del cuento, pues ambos personajes pasaban día y noche en constante conflicto hasta por cosas insignificantes y tras el fallecimiento de la morena, el narrador manifiesta que aquel hecho tornó el comportamiento de Memo igual al de un hombre solitario. “(…) Se aburría en su cuarto silencioso, adonde habían terminado por llegar las grietas de la pieza vecina. Pasaba largas horas en la galería fumando sus cigarrillos ordinarios, mirando la fachada de esa casa vacía, en cuya puerta los propietarios habían clavado dos maderos cruzados.” En relación al análisis del plano de la expresión, encontramos que el narrador se presenta de manera homodiegética, como testigo, esto otorga efecto de verosimilitud a los hechos que se suscitaron en el cuento, ya que el narrador cuenta lo que vió y escuchó haciendo prevalecer el lenguaje que los personajes utilizan al expresarse uno del otro. “(…) Nosotros los habitantes de la quinta, comenzamos a darnos cuenta que esa banal enemistad entre vecinos hollaba el terreno del delirio. (…)”
De acuerdo al tiempo, el texto es narrado en tiempo pasado, puesto que toda la historia está basado en recuerdos, además es constante el uso de verbos en tiempo pasado, los que a su vez se presentan en conjugación del pretérito indefinido, de esta manera el escrito refleja que los hechos fueron puntuales y no se prolongaron, al relacionarlo con el cuento, podemos decir que cada acto que Memo realizaba a Pancha, o viceversa, ocurrieron una sola vez.
El espacio en el texto es cerrado, pues todos los hechos ocurren dentro de una quinta ubicada en Miraflores, el espacio otorga al texto un sentido lógico, ya que al ser una quinta, se convive de cierta manera con los vecinos estableciendo relaciones, que en ocasiones pueden ser asertivas, o como en el cuento que pueden llegar a ser hostiles.
En cuanto al estilo, en el nivel morfológico, encontramos muchos epítetos, debido a que constantemente los insultos lanzados tanto a Memo como a Pancha destacan sus rasgos y características físicas como lo manifiesta a siguiente cita: “(…) Una vecina vieja y gorda (…)”.
El nivel Semántico en el texto se hace presente con la siguiente metáfora “(...) tenían su casa como unos verdaderos chanchos (…)”, esta figura semántica nombra a los chanchos que son sinónimo de desorden, suciedad y asquerosidad, por lo tanto se puede interpretar que Pancha con esta frase quería referirse a lo descuidado que era Memo García con su espacio en la quinta. El autor, mediante imágenes, en este caso las metáforas, coloca las características de los personajes con un tono de ambigüedad.
De la misma manera, otra de las figuras literarias presentadas es la etopeya mostrada en la cita “(…) ¡Y en la iglesia se da golpes de pecho, la hipócrita! (…), aunque doña Pancha no era del todo hipócrita, una etopeya describe el carácter y valores de la persona, permitiéndonos conocer más del personaje. El lenguaje es uno de los aspectos más importantes en el texto, ya que estos demuestran ciertas actitudes y características de los personajes, el lenguaje usado en ciertas partes el coloquial, pero el que sin duda predomina es el lenguaje vulgar, evidenciado en las siguientes citas: “¡Ya lo vi, sinvergüenza, viejo marica, quiere hacer trizas mi jardín!”, “¡Negra!”, “¡Lo va a hacer pedazos, empleadito de mierda!”. Con esto se demuestra que ambos personajes no llevaban una buena relación como vecinos, pues siempre la vida de ambos se veía envuelta en conflictos que desataban insultos por parte de los protagonistas. Los insultos en el texto, evidencian la poca cultura de los personajes, también este lenguaje ordinario resalta los defectos de Pancha “(…) vieja pedorra (…)” y a su vez los de Memo García “(…) Viejo idiota, ¿qué hace allí espiándome? (…), “(…) Cara de poto. Asqueroso, tísico, pestífero”. Los duros calificativos que utilizaban los personajes para dirigirse al otro contribuían al sentimiento de molestia y hostilidad, acrecentando más y más las discusiones hasta llegar a fuertes peleas verbales.
El nivel Semántico en el texto se hace presente con la siguiente metáfora “(...) tenían su casa como unos verdaderos chanchos (…)”, esta figura semántica nombra a los chanchos que son sinónimo de desorden, suciedad y asquerosidad, por lo tanto se puede interpretar que Pancha con esta frase quería referirse a lo descuidado que era Memo García con su espacio en la quinta. El autor, mediante imágenes, en este caso las metáforas, coloca las características de los personajes con un tono de ambigüedad.
De la misma manera, otra de las figuras literarias presentadas es la etopeya mostrada en la cita “(…) ¡Y en la iglesia se da golpes de pecho, la hipócrita! (…), aunque doña Pancha no era del todo hipócrita, una etopeya describe el carácter y valores de la persona, permitiéndonos conocer más del personaje. El lenguaje es uno de los aspectos más importantes en el texto, ya que estos demuestran ciertas actitudes y características de los personajes, el lenguaje usado en ciertas partes el coloquial, pero el que sin duda predomina es el lenguaje vulgar, evidenciado en las siguientes citas: “¡Ya lo vi, sinvergüenza, viejo marica, quiere hacer trizas mi jardín!”, “¡Negra!”, “¡Lo va a hacer pedazos, empleadito de mierda!”. Con esto se demuestra que ambos personajes no llevaban una buena relación como vecinos, pues siempre la vida de ambos se veía envuelta en conflictos que desataban insultos por parte de los protagonistas. Los insultos en el texto, evidencian la poca cultura de los personajes, también este lenguaje ordinario resalta los defectos de Pancha “(…) vieja pedorra (…)” y a su vez los de Memo García “(…) Viejo idiota, ¿qué hace allí espiándome? (…), “(…) Cara de poto. Asqueroso, tísico, pestífero”. Los duros calificativos que utilizaban los personajes para dirigirse al otro contribuían al sentimiento de molestia y hostilidad, acrecentando más y más las discusiones hasta llegar a fuertes peleas verbales.
Finalmente, el cuento “Tristes querellas en una vieja quinta” nos invita a reflexiona acerca de un aspecto social: Los conflictos vecinales, debido a que en todas las quintas o conjuntos vecinales, siempre estarán los problemas como parte de la convivencia. En el caso del cuento, Memo y Pancha son un claro ejemplo de como la convivencia puede tornarse hostil, a pesar de que dentro de esa hostilidad existía un sentimiento de compañía.
Considero que el cuento de Ribeyro causo en mi gran impacto, pues el manejo literario del lenguaje verbal, dota al texto de expresividad y realismo, configurando a los personajes y sus características internas y externas. Por otro lado, el aspecto que me pareció interesante fue que el autor mediante su relato expresa su añoranza hacia la Lima de antaño, en especial al distrito de Miraflores, que en la época que escribió el cuento, pasaba por su etapa de modernización, pues presenta a una actual Lima moderna con algunos rastros antiguos y vigentes como los son las quintas.
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ResponderEliminarQuerida amiga Denisse, te agradezco mucho por tu increíble trabajo, me ayudo mucho en mi tarea de Literatura, y pude alcanzar la mayor nota de mi salón, espero que sigas realizando trabajos de esta calidad, gracias de nuevo.
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ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por violencia y discriminación por el autor.
ResponderEliminarte falta mas análisis te recomiendo leer guía de Rodriguez
ResponderEliminarChicos este comentario sirve como ejemplo, no para que lo copien tal cual...
ResponderEliminarEste mensaje fue eliminado por la autora por el rechazo a los hombres.
ResponderEliminareste comentario fue eliminado por ser tan guapo :v
ResponderEliminarcallo oe v:
EliminarHola muy bueno el comentario de esta obra me sirvió mucho para mi Booktube Gracias
ResponderEliminarcanario
Eliminar???
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